Consiste en la baja visión de uno o ambos ojos por falta de uso en el periodo de desarrollo visual, que se da hasta antes de los 8 años aproximadamente. Es una patología que se origina en la infancia, pero si no es diagnosticada y tratada a tiempo, puede prolongarse durante la edad adulta.
Las principales causas son:
- Estrabismo
- Defectos refractivos: miopía, hipermetropía y astigmatismo.
- Catarata congénita
- Ptosis palpebrales (caída del párpado)
- Enfermedades retinianas
Los padres o los profesores pueden sospechar de una ambliopía u ojo perezoso, si el niño:
- No identifica de forma adecuada a las personas en distancias largas,
- Se acerca mucho los objetos a la cara,
- Desvía un ojo.
Muchas veces el niño se desenvuelve con total normalidad y la Ambliopía no es detectada a tiempo. Es por eso necesario que todo niño a partir de los 4 años acuda a una consulta oftalmológica para detectar la enfermedad de forma precoz y dar un adecuado tratamiento.